CONFINAMIENTO Y VIDA INTERIOR

En esta sociedad en la que vivimos en que lo que suele imperar es la inmediatez, las comunicaciones breves , la eficacia, todo a golpe de clic,  en paralelo con el detrimento de las conversaciones pausadas de antaño en que el tiempo parecía detenerse en encuentros con charlas personales, este confinamiento obligado, empuja a la introspección de la población, a encontrarse con uno o una misma, a cultivar la vida interior, a pensar sobre la existència, el sentido y la finitud de la vida… lo cual no es incompatible con un cierto grado de comunicación con el exterior gracias a la tecnología.

Posiblemente esta situación pondrá a prueba ese tipo de reservorio psíquico, este espacio profundo en el que los pensamientos y sensaciones conectan con la noche oscura del alma como se refería S Juan de la Cruz,  el psicoanálisis sabe también mucho de esto.

Una buena y apreciada conocida de muchos años , psicóloga , experta en kábala y temáticas teológicas avisó hace pocos dias a su círculo próximo que cerraba su consultorio y se retiraba sine die a un retiro monástico.

Los caminos individuales son múltiples para hacer frente a esta situación inédita que estamos atravesando, que parece extraída de una película de ciencia ficción que de tanto recrearlas pasan a ser realidad.Los pacientes ahora  atendidos por telefono o skype mencionan-como no podria ser de otro modo-la situación sanitario-social que nos implica, pero también muchos de ellos admiten que la situan como un telón de fondo cuando sus problemáticas personales de todo tipo siguen ahí y requieren respuestas  no solo sociales sino a nivel de sujeto.

En el equilibrio entre lo íntimo y lo colectivo posiblemente se encuentren los recursos para atravesar este túnel.

Gemma Cánovas

Psicóloga clínica y Psicoterapeuta

gcanovassau@gmail.com